/el metal de sus ojos
tan largo como la noche
que precede al vértigo...
el agujero de sus ojos
donde se posa la tormenta
tiritando como la lágrima
o como la piel del suicida...
obcecada en tenerte en mi vientre,
allí donde se posan los pájaros
huyendo de su muerte/
10 de enero de 2014
Publicado por la princesa inca en 22:49:00