" Desnudo sobre fondo azul, 1913" Pierre-Albert Marquet
Cada vez salgo de este metro donde he nacido
con los ojos de no-volver ,
estoy desnuda cada pequeña noche de lluvia y mi piel blanca no existe,
hombres con ojos oscuros no comprenden ,
vendedores en las tiendas no comprenden ,
mujeres altas y de zapatos grises no comprenden ,
me tapan la boca pero yo sé que tengo a veces la fuerza de la furia
y si no lloro acaricio piel y me gusta el delirio si no caigo hasta morir ,
me gusta recordar la locura y como he paseado sin comer durante días,
recordar los parques de noche donde se me comía el universo ,
y el infinito en las venas, y la sensación de ser el vértigo, el vacío y el paraíso...
sólo algunos lo comprenden...
que no existe ni el más pequeño de los versos ni el más largo y exquisito de los cuentos, ni la pintura sin este horror y este diamante de locura, que ha gastado su nombre de tanto existir
y tanto dar a la manos de los que beben algo más que lo que cualquiera sabe.
Bésame en la boca loca mía y bailemos las dos desnudas hasta morir de crear poemas o cielos con cristales descoloridos..
y si algunos no entienden este idioma o esta muerte, o este ser de locura y dolerse de ella pero ir amándola, también caberan en mis brazos...pero quedan muy lejos del cielo infinito de los locos allí donde habita lo indecible, el murmullo de lo que no se dice por innombrado, la única verdad para ir más allá de lo que se conoce.
Silencio. Silencio! ...Dejen hablar a ese loco!
con los ojos de no-volver ,
estoy desnuda cada pequeña noche de lluvia y mi piel blanca no existe,
hombres con ojos oscuros no comprenden ,
vendedores en las tiendas no comprenden ,
mujeres altas y de zapatos grises no comprenden ,
me tapan la boca pero yo sé que tengo a veces la fuerza de la furia
y si no lloro acaricio piel y me gusta el delirio si no caigo hasta morir ,
me gusta recordar la locura y como he paseado sin comer durante días,
recordar los parques de noche donde se me comía el universo ,
y el infinito en las venas, y la sensación de ser el vértigo, el vacío y el paraíso...
sólo algunos lo comprenden...
que no existe ni el más pequeño de los versos ni el más largo y exquisito de los cuentos, ni la pintura sin este horror y este diamante de locura, que ha gastado su nombre de tanto existir
y tanto dar a la manos de los que beben algo más que lo que cualquiera sabe.
Bésame en la boca loca mía y bailemos las dos desnudas hasta morir de crear poemas o cielos con cristales descoloridos..
y si algunos no entienden este idioma o esta muerte, o este ser de locura y dolerse de ella pero ir amándola, también caberan en mis brazos...pero quedan muy lejos del cielo infinito de los locos allí donde habita lo indecible, el murmullo de lo que no se dice por innombrado, la única verdad para ir más allá de lo que se conoce.
Silencio. Silencio! ...Dejen hablar a ese loco!
